Dentro de un terreno boscoso en la zona denominada Casas Viejas, se percibieron actividades de remoción de vegetación forestal con maquinaria pesada, derribando arbolado joven y adulto, con la finalidad de cambiar el uso de suelo forestal a habitacional.
Frente a estos hechos se presentó una denuncia ante la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa), esta dependencia inspeccionó el sitio en donde detectó irregularidades en materia ambiental lo que llevó a que clausurara el sitio instaurando el procedimiento sancionador respectivo, el cual aún se encuentra substanciándose.